jueves, 12 de abril de 2012

El David de Verrochio

El "David joven", obra en bronce de Verrochio, en 1467, cuando el autor tenía treinta y dos años, es decir, estaba en su etapa de plenitud. La altura es 125 cm., por lo tanto menor que el natural, y se encuentra en el Museo Nacional del Bargello en Florencia. Fue un encargo de Juliano y Lorenzo de Medici.

Verrochio nació en la capital toscana en 1435 y murió en Venecia en 1485, por lo que su vida no fue larga en comparación con la de otros artistas del renacimiento. Fue escultor, pintor y orfebre, como otros artistas del renacimiento que, imbuidos de un afán por el aprendizaje, querían abarcar más de un arte. Como sabemos hubo también teóricos de la arquitectura, biógrafos, buscadores de antigüedades... Verrochio trabajó para Lorenzo de Medici, por lo que el mecenazgo está también en su vida y en su obra, casi una exigencia en la época de la que estamos hablando. Discípulos suyos fueron Leonardo y Botticelli, entre otros, lo que demuestra la valoración que se tenía de él ya en vida. 

Las obras escultóricas de Verroquio abarcan el tema religioso (quizá una obra singular de él es "Cristo y la duda de Sto. Tomás") donde supera el gusto gótico en el tramiento de los plegados de los ropajes, con mucho más volumen. También esculpió bustos (de Giulano, de Lorenzo y de Piero de Medici), un retrato de mujer, un retrato de perfil, en mármol, de Alejandro Magno y la estatua ecuestre del condotiero Colleoni. 

En su "David" se distancia de la obra de Donatello, porque el modelado es menos idealizado, sin la sensualidad que Donatello imprime a su obra. Sin embargo también podemos encontrar semejanzas: David es un muchacho (en realidad así nos lo deja ver el relato bíblico), con el rosto aniñado y una sonrisa pintoresca, que demuestra el interés de Verrochio por los detalles. El estudio anatómico es cuidado, pero este "David" no tiene la tensión del de Miguel Ángel (son dos temperamentos distintos y dos momentos también distintos), y por supuesto hay una enorme diferencia con el "David" del barroco Bernini, con el ceño fruncido por el esfuerzo, mientras que en el de Verroquio (como en el de Donatello) David ya ha vencido al gigante, cuya cabeza yace a sus pies, y el joven muestra su satisfacción y serenidad. La composición es abierta, verdera obsesión de los artistas del renacimiento, que quieren imprimir movimieto a sus figuras incluso cuando están en calma, con esa inflexión praxiteliana al hacer descansar el peso del frágil cuerpo en una sola pierna, mientras la otra se flexiona.
 
 Ver: http://arte.observatorio.info/2008/04/david-andrea-del-verrocchio-1467 .









No hay comentarios:

Publicar un comentario