miércoles, 2 de mayo de 2012

Felipe Bigarny, escultor (1)

Una de las obras más sobresalientes de Felipe Bigarny es el trasaltar de la capilla mayor de la catedral de Burgos, ciudad a la que estuvo muy vinculado desde que vino a España. Era borgoñón y la influencia del gótico de su patria se verá en varias de sus obras. Bigarny nació en 1475 y murió en Toledo en 1542: en realidad casi nunca se desprendió del gótico, aunque hay que enmarcarlo en pleno renacimiento, pues su trabajo en Castilla estuvo muy influido por el último estilo medieval. 

Trasaltar de la capilla mayor de la catedral de Burgos
 Fundamentalmente escultor, fue también arquitecto, pero como artista plástico llegó a tener tal fama y demanda que mantuvo varios talleres bajo su dependencia. Era norma que cuando un artista había alcanzado prestigio no pudiese atender a todas las peticiones, por lo que dirigía talleres y no todas las obras de los mismos eran del artista principal. Esto se enmarca dentro del papel protagonista que alcanzan los artistas en el renacimiento, contrariamente a lo ocurrido durante la edad media: se conocen muchas obras pero pocos astistas, porque estos no eran estimados como lo serán después. 

Camino del Calvario (izquierda del trasaltar)
 En 1498 se le encargó el trasaltar que aquí comentamos, poniéndose de relieve el papel dominante que la Iglesia jugaba en el arte como comitente. El material elegido fue piedra caliza, lo que ha dado -además de cierta desidia- el deterioro que hoy sufre la obra. A la izquierda representó el camino al Calvario, siendo la primera obra que está documentada de éste autor en Burgos. En el centro se representa la crucifixión y a la derecha el descendimiento de la cruz, toda la obra en piedra. 

Crucifixión (parte central del trasaltar)
 Hay características góticas, como los personajes amontonados al fondo sin guardar perspectiva alguna (camino del Calvario), pero también está el gusto renacentista: las actitudes movidas y naturalistas de los personajes. La puerta de la ciudad, al fondo, es también un elemento que suele aparecer en obras renacentistas de otros autores, sobre todo en Italia. En dicha puerta hay decoración de "candelieri", término italiano que designa una minuciosa decoración de hojas, zarzas, líneas curvas y cintas (en las fotografías que hemos conseguido no se observa éste detalle). 
Ascensión (no corresponde a Bigarny: es obra de finales del siglo XVII: Pedro A. de los Ríos)
 En el Calvario central predomina el tratamiento anatómico de Cristo y de los crucificados a su lado, moviéndose estos como símbolo de su intranquilidad (eran dos ladrones), mientras Cristo se muestra sereno como símbolo de su santidad y superioridad. Los desnudos son clásicos antes que nada. Los demás personajes, algunos soldados romanos, y todos en actitudes diversas y muy movidas, son también una muestra de que se superaba el gótico, más hierático y supeditado a la arquitectura. Hay un estudio de perspectiva con un paisaje al fondo que no llega a la delicadeza que se puede observar en las puertas de Ghiberti. 

A la derecha se representa el descendimiento de la cruz, muy deteriorado por el "mal de la piedra". Todo el conjunto está concebido sobre un zócalo, y sobre él una serie de esculturas sedentes con ropajes muy abultados y movidos; las mismas figuras adoptan posturas distintas entre sí, pero bajo doseletes góticos. En la parte superior arcadas flamígeras (influencia borgoñona) con decoración muy calada, lo que da al conjunto una riqueza ornamental extraordinaria. 

De nuevo estamos ante un artista foráneo que se instala en Castilla -otras vece en Andalucía, en Galicia...- con el soporte de la influencia que la monarquía española tenía en la época: vemos a Torrigiano en España, ahora a Bigarny, y no son los únicos. 

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